Vídeo: Deja una huella memorable
Dicen que toda la creación es producto del movimiento, que los ejes de la tierra nos regalan los días y las noches, vivimos en un constante sube y baja de decisiones. Entonces, ¿por qué limitarnos a una comunicación estática?.
Secuencias de imágenes corridas a alta velocidad dan a nuestros cerebros la ilusión de movimiento continuo. En la publicidad hemos aprendido cómo usarlo en nuestro favor. Capturar la atención de nuestros clientes puede ser fácilmente con un vídeo y mensajes que puedan crear empatía entre los usuarios y los productos o servicios que brindemos.
La transmisión secuencial de imágenes crea mayores impactos en la imaginación del espectador, se estimulan las partes del cerebro que dan vida a los recuerdos y de esta manera una marca o producto puede ser recordado.
Los beneficios de una buena producción audiovisual pueden rebasar las fronteras de lo imaginable.